os tocó el rostro el Señor.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

El profético desvelo

del Aguila Evangelista,

con su penetrante vista

os vio volar por el cielo,

Angel y Predicador

del Juicio final cercano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Como profeta anunciáis

las naves de Barcelona,

y de Aragón la corona

al rey Don Fernando dais.

Vuestro voto superior

hizo este negocio llano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

El precioso manantial

del pozo de vuestra casa,

concede salud sin tasa

al que bebe su cristal.

Quedando con tal favor

de todo mal libre y sano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Son vuestros milagros tantos

que no se pueden contar,

siendo en todo singular

y asombro de los mismos Santos.

Ya triunfante el Vencedor

sois del cielo ciudadano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Angel, Profeta, Doctor

y anunciador del Juicio,

sed con Valencia propicio

de quien sois lustre y honor.

Alcanzadnos del Señor

la salud por vuestra mano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Como Precursor segundo

con mil prodigios nacéis,

y el Domingo escogéis

la antorcha que alumbre al mundo.

Siendo su mastín mejor

está el dueño muy ufano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Vuestra portentosa vida

fue la misma penitencia,

en dar al cuerpo licencia

en el sueño y la comida.

En el virginal candor

parecéis ángel humano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Librasteis del Purgatorio

a vuestra hermana querida,

que os apareció afligida

de la Misa al ofertorio.

Del treintenario el fervor

fue su remedio temprano.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

Pues con su divina mano

os tocó el rostro el Señor.

Sednos padre y defensor,

Santo Apóstol Valenciano.

V. El Señor condujo al justo por el buen camino, aleluya.